Los caballos balancín de madera son una vía para incentivar el juego lejos de las pantallas y mover el cuerpo.
Fortalece el nivel cognitivo. Al incentivar el juego de rol se desarrolla tanto la capacidad de imaginar, como la capacidad de pensar para representar una situación sobre el caballo balancín o con el caballo de madera
Mejora las relaciones sociales. El caballo balancín de madera es un juguete Montessori ideal para jugar al aire libre con hermanos o amigos, lo que permite desarrollar el comportamiento social al interactuar con otros niños de su edad.
Favorece la expresión emocional. Al subir sobre el caballo, el niño adopta un rol y es capaz de mostrar y canalizar emociones a través de ese papel ficticio que representa. Emociones que, por condicionantes internos, externos y/o sociales, a veces no es capaz de mostrar.
Desarrolla las habilidades físicas. Al balancearse, el niño desarrolla el sistema vestibular (equilibrio) y coordina los movimientos oculares con los movimientos de la cabeza. También desarrolla la conciencia de su cuerpo (propiocepción), la coordinación y fortalece los músculos de la parte superior del cuerpo al tener que sujetarse y hacer fuerza con los brazos.
Potencia el lenguaje. Cuando tu peque juega a imitar lo hace en todos los sentidos. No solo a nivel físico, imitando gestos o acciones, sino también a nivel verbal. El niño se fija en cómo hablan los adultos o qué palabras y expresiones se utilizan en ciertas circunstancias y no duda en utilizarlas en sus aventuras imaginarias con el caballo balancín de madera.